En 1943 se llamó a un concurso Internacional a fin de que se presentaran los proyectos del nuevo Templo Votivo y en el cual obtuvo el primer premio nuestro compatriota don Juan Martínez.
El 16 de julio de 1944, día de Nuestra Señora del Carmen, se colocó la primera piedra, en una imponente ceremonia a la cual concurrió S.E el Presidente don Juan Antonio Ríos y los ex – Presidentes señores Arturo Alessandri Palma y Carlos Ibáñez del Campo, acompañados de los ministros de Gobierno, Fuerzas Armadas, representantes del Parlamento, autoridades civiles, eclesiásticas, y Cuerpo Diplomático.
La iglesia estuvo representada por el arzobispo de santiago, más tarde Cardenal, don José María Caro Rodríguez, por el Nuncio Apostólico de Su Santidad, Arzobispo Titular de Lepanto, Don Mauricio Silvani, y por incansable y noble Vicario Castrense, Obispo titular de Gerisso y Presidente General del Voto Nacional O’Higgins, Monseñor Teodoro Eugenín Barrientos.
El gobierno Argentino se hizo presente con el arquitecto don Raúl Pasman y en nombre del Ejército y de la iglesia el Ilustrísimo Señor Vicario Castrense Monseñor Andrés Calcagno. La ceremonia revistió impresionante sencillez. El Presidente de la República, don Juan Antonio Ríos, dio tres golpes de martillo en la campana -que se había colocado ex profeso-
Mientras el Nuncio Apostólico bendecía la primera piedra y hacía descenderla hoyo abierto, en medio del recogimiento de todos los presentes.
El discurso de fondo de la ceremonia, a nombre de los Obispos de Chile, fue pronunciado por Monseñor José María Caro.
Desde hace 35 años se ha ido alzando el coloso arquitectónico de fierro y cemento que
ocupa el mismo llano regado con sangre de héroes.
La abnegada labor de las mujeres de nuestra tierra, su fe y patriotismo las han llevado a cumplir el Voto del Libertador. Se destaca entre ellas la dignísima dama señora Marta Ossa de Errázuriz, Vicepresidenta ejecutiva del “ Voto Nacional O’Higgins “, que ha hacho del Templo Votivo su hogar y la labor de se realiza junto a él es parte de su corazón. La verdadera unión americana y patriótica está ahora bajo sus manos y es obra suya.
Relatamos hechos que estamos viviendo y no deben ser olvidados.
Mientras tanto, una moderna parroquia se construirá en otra arteria del pueblo. El progreso lo arrolla todo y nuevos muros cobijaran a los fieles que buscan tranquilidad espiritual y fe.
Historia de Maipú
de Raúl Tellez Yañez.